Clean Talk y los amigos imaginarios

Todo era un cuento de hadas. Un día imprimí postales y se las regalé a muchos amigos, la mayoría de ellos en agencias de publicidad, que es el medio donde me desenvuelvo aproximadamente desde la edad media. Al ver la gran respuesta, tomé la decisión de que un día montaría mi propia tienda virtual y pondría allí hermosos productos para que todos mis seguidores pudieran tener algo de mi trabajo en casa. El tiempo pasó, reuní habilidades, conocimiento y algo de dinero para cambiar la estructura del blog y convertirlo luego de bastante trasnocho en un sencillo y seguro e-commerce llamado #LaTiendaDeTriego (http://www.triego.com/shop/).

Pasado el tiempo la tienda empezó a funcionar con los mugs que me ayuda a producir Mug Bonito y más adelante vendrían los muñecos que hago con Tosty Toys (próximamente llegarán las postales nuevas, las bolsas de mercado y cuanto otro producto con verdadero sentido vaya apareciendo). Las ventas empezaron a moverse de a poco, pero de repente me llené de registros extraños de personas con apellidos impronunciables y que comentaban en cuanto post encontraban, generalmente cosas sin sentido, con frases que al parecer eran traducciones genéricas de Google Translate. Incluso a veces los comentarios resultaban ser links a sospechosas páginas de medicamentos para disfunciones de todos los idiomas.

Así es, sin intención estaba creando una base de datos de amigos imaginarios, más conocidos en el bajo mundo como «spam», que es algo a lo que se van a enfrentar si un día deciden tener un blog administrado por ustedes mismos como los que funcionan sobre wordpress (no el .com, el .org) y demás plataformas. Obviamente no era algo con lo que quisiera lidiar, pero sí era algo con lo que me tocaba lidiar, así que recurrí al todo poderoso Google para que me iluminara en el proceso. Luego de ver muchas alternativas, y promediando las opiniones en foros, los reviews, las calificaciones y demás datos que aparecían como si fuera spam, me decidí por una opción que no me costaba un ojo de la cara y que parecía hacer lo que prometía hacer.

Antes de decirles dónde encontrar la herramienta y un par de datos más acerca de ella, tengo que compartirles esta caricatura acerca de amigos imaginarios, la cual exige un mínimo de conocimiento de matemáticas, para los que aman los números. Y menciono lo del gusto por los números porque resulta ser una patología recurrente en la gente que escribe un blog, especialmente cuando desarrollan cierto tipo de adicción por las estadísticas. Además, un par de caricaturas de robots, familiares de los bots que combate la herramienta que les mencionaré.

Y bueno, para finalizar este post, la herramienta de la que les hablo es CleanTalk, una aplicación anti spam que se encarga de todos esos bots que generan registros falsos y comentarios spam, sin necesidad de captchas ni nada que pueda ver el usuario del sitio. Aparte de eso, en su sitio tienen un plan de bonos que permite ganar meses gratis de servicio con acciones tan simples como compartir un post en linked in o cosas por el estilo (yo ya he activado unos 5 meses adicionales). Igual, ignoren los regalos, el solo hecho de que haya podido cancelar esa avalancha de registros diarios y comentarios basura que aparecían y aparecían, es suficiente razón para darle una oportunidad.

Aquí lo pueden encontrar: https://cleantalk.org/